Hugh Herr, reconocido investigador en prótesis y líder en el desarrollo de tecnologías para amputados, presento un avance revolucionario en el campo de la biónica. Su equipo en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) ha desarrollado una interfaz neuroprostética que ofrece un nivel sin precedentes de control cerebral sobre las prótesis biónicas.
El dispositivo, denominado AMI, permite a usuarios con amputaciones por debajo de la rodilla experimentar una marcha más natural y eficiente. Conectando quirúrgicamente músculos agonistas-antagonistas con electrodos externos, el sistema restaura la propriocepción, permitiendo al sistema nervioso controlar el movimiento de manera intuitiva.
En ensayos clínicos, los usuarios equipados con la prótesis AMI mostraron una mejora significativa: aumentaron la velocidad de la marcha en un 41% y lograron una biomecánica similar a la de personas sin amputación. La tecnología demostró eficacia tanto en terrenos irregulares como en escaleras y rampas, marcando un hito en la rehabilitación de amputados.
Aunque el dispositivo activo presenta ventajas notables en la recuperación de la función biomecánica, los investigadores reconocen desafíos como la miniaturización y la integración estética, que podrían limitar su adopción masiva frente a prótesis pasivas más convencionales.
Este avance no solo promete mejorar la calidad de vida de millones de personas amputadas en todo el mundo, sino que también abre nuevas posibilidades en la integración de tecnologías avanzadas para la salud y la rehabilitación.