Un nuevo tratamiento con anticuerpos hace que el sistema inmunológico de ratones mayores parezca más joven, permitiendo a los animales defenderse mejor contra infecciones y reducir la inflamación. Investigadores de la Universidad de Stanford en California desarrollaron un tratamiento experimental que rejuvenece el sistema inmunológico de ratones mayores, mejorando su capacidad para combatir infecciones. Si funciona en humanos, la terapia podría revertir los declives relacionados con la edad en la inmunidad que dejan a los adultos mayores susceptibles a enfermedades.
Los declives en la inmunidad relacionados con la edad pueden deberse a cambios en nuestras células madre sanguíneas, que pueden desarrollarse en cualquier tipo de célula sanguínea, incluidos algunos componentes clave del sistema inmunológico. A medida que envejecemos, una proporción mayor de estas células madre se inclinan a producir ciertas células inmunes sobre otras, lo que afecta la capacidad del sistema inmunológico para combatir infecciones y aumenta la inflamación crónica.
El tratamiento desarrollado por el equipo de investigación utiliza anticuerpos para dirigirse a estas células madre inclinadas. Después de probarlo en ratones mayores, observaron una reducción del 38 por ciento en estas células anómalas y un aumento significativo en dos tipos de glóbulos blancos esenciales para combatir patógenos, así como niveles más bajos de inflamación.
Los resultados indican que el tratamiento con anticuerpos rejuvenece el sistema inmunológico de ratones mayores, lo que sugiere que podría tener efectos similares en humanos. Sin embargo, se necesitan más investigaciones para comprender mejor los posibles efectos secundarios del tratamiento, incluido el riesgo de cáncer.
A pesar de ello, estos hallazgos representan un avance prometedor en nuestra comprensión del declive inmunológico relacionado con la edad y cómo mitigarlo, según los expertos. Rejuvenecer o mejorar la función inmunológica en personas mayores podría ayudar significativamente a combatir infecciones y enfermedades inflamatorias crónicas, lo que abre nuevas posibilidades terapéuticas en el campo del envejecimiento y la salud.